Las comunidades cerradas brindan a los residentes una mayor sensación de seguridad, reducen el tráfico de vehículos, limitan los accesos y ofrecen otros beneficios. De hecho, muchos posibles arrendatarios dicen que el acceso privado es un factor importante para firmar o renovar un contrato. Pero existen desafíos asociados con las entradas en comunidades cerradas que pueden hacer que los residentes se sientan frustrados o incluso inseguros. El más común es alguien que acompaña a un residente a la comunidad mientras la puerta está abierta.
Entonces, ¿cómo resuelves este problema?
El problema del tráfico en comunidades: ‘‘Tailgating’’
“Tailgating” puede traducirse al español-chileno como ‘‘colarse’’. Se refiere al ingreso de un vehículo no autorizado, que entra a la comunidad atrás de un residente u otra persona autorizada, tan de cerca que pueden pasar por la puerta mientras permanece abierta.
El tailgating es una violación de seguridad grave, aunque no todos los tailgating tienen intenciones maliciosas. Las personas a menudo se acercan durante las horas punta del día para reducir el tiempo de espera cuando los autos comienzan a apilarse en la puerta. En otros casos, es solo un residente autorizado que se acerca porque olvidó sus credenciales de acceso o llavero, o es un invitado de un residente que sigue al residente a casa en su propio vehículo.
Dicho esto, el tráfico sigue siendo una amenaza para la seguridad del personal y de los residentes, por lo que es mejor prevenirlo por completo.
Y la seguridad no es lo único que está en juego; otros riesgos comunes de la persecución incluyen:
– Daño físico a la puerta, que puede conducir a reparaciones costosas.
– Una reputación negativa para su comunidad causada por la percepción de que no es segura.
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¿Por qué las estaciones de vigilancia no son suficientes’?
Históricamente, la solución más popular para administrar de manera segura y eficaz el acceso a la puerta ha sido construir una estación de guardia atendida las 24 horas, los 7 días de la semana. Los encargados de la puerta tienen la tarea de verificar la identidad de los residentes y examinar a los visitantes antes de otorgarles acceso a la propiedad.
Pero esta solución presenta dos desafíos distintos. En primer lugar, es caro: además de los costos iniciales asociados con la construcción de una estación de guardia, se suma la dotación de personal. El otro desafío es que puede ser lento. Verificar manualmente los permisos y llamar a los residentes para confirmar puede provocar un atasco en su puerta.
Aquellos que buscan una alternativa a una estación de guardia con personal completo deben considerar una mejor solución de seguimiento: un sistema de intercomunicación en la puerta.
Los intercomunicadores reducen el tráfico de personas en comunidades cerradas
Ya sea que no tenga el espacio para una estación de guardia física, no desee incurrir en gastos de construcción o de personal, o simplemente esté buscando una opción más eficiente, es hora de invertir en un sistema de entrada.
Los intercomunicadores de puerta simplifican el control de acceso a la comunidad cerrada. Al instalar un intercomunicador en la entrada principal de su propiedad, puede acelerar el flujo de tráfico y mitigar los problemas de acceso comunes, como el tráfico de vehículos, el estacionamiento de vehículos y más.
La elección del mejor sistema de intercomunicación en la puerta es fundamental, por lo tanto:
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Seleccione un sistema que conecte directamente la puerta con el residente
Asegúrese de elegir un sistema de intercomunicación de puerta para múltiples residentes, no un sistema de estación única, para que los visitantes puedan comunicarse directamente con los residentes para obtener acceso. Debido a que el residente puede identificar inmediatamente al visitante y aprobar la entrada, los vehículos pueden atravesar las puertas mucho más rápido que si tuvieran que esperar a que un encargado de la puerta registre su información.
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Sistema de intercomunicación basado en aplicaciones móviles
Otra forma de mejorar el flujo de tráfico en su entrada cerrada es instalar un sistema de intercomunicación en la puerta basado en una aplicación. Un sistema de entrada de puerta con una aplicación móvil significa que los visitantes pueden llegar a los residentes en cualquier momento, incluso si no están en casa. Con solo deslizar o presionar un botón, los residentes pueden abrir la puerta desde cualquier lugar.
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Llaves virtuales para un acceso rápido
Otra forma de facilitar una entrada más fluida a la puerta es eligiendo un sistema que permita entregar a las visitas llaves virtuales de acceso temporal. Muchos sistemas de intercomunicación de puerta basados en la nube, como SMARTKI, ofrecen estas características.
Los residentes pueden crear y enviar claves virtuales a los visitantes con anticipación. Los huéspedes reciben un código QR que se puede usar a pedido, lo que elimina la necesidad de llamar a su llegada.
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Cámara incorporada en la comunidad cerrada
Un sistema de intercomunicador en la puerta con una cámara evitará el tráfico de vehículos de forma natural al actuar como un elemento disuasorio para los posibles usuarios a cuestas. Esta impresión suele ser suficiente para evitar que rompan las reglas.
Otras formas de reducir el tailgating en comunidades cerradas
Instalar un sistema de intercomunicación en la puerta que asegure la puerta y mejore la facilidad de entrada, es una forma de minimizar el tráfico de personas, pero es posible que la comunidad cerrada desee complementar el intercomunicador con soluciones adicionales.
Puedes combatir el ‘‘Tailgating’’ con:
– Barreras de ingreso que hagan detener a los vehículos
– Reductores de velocidad
– Educación para residentes
Todas las soluciones propuestas con SMARTKI son posibles y 100% adaptables a las necesidades de tu comunidad cerrada